lunes, 25 de noviembre de 2013

 
 
Esta receta no tiene ningún mérito esta hecha con un paquete de esos de "comida de astronauta". Vamos, que viene todo en bolsitas y solo hay que seguir las instrucciones. Pero me lo pase muy bien haciéndolos con mis peques. Lo mas complicado fue terminar de decorarlos antes de que entre los tres se comiesen las virutas de colorines y el chocolate de la cobertura.  






 
Después de la cosecha de cidras de este año toca poner la receta. Lo ideal es dejarlas entre 6 y 12 meses después de recogerlas. La receta que os pongo a continuación la he hecho con 2 que tenía del año pasado.



INGREDIENTES
  • Una cidra (calabaza de cabello de ángel)
  • Azúcar
  • 1 limón
  • Agua
  • Un palo de canela
ELABORACIÓN
 
Cortamos la calabaza en trozos, le quitamos la piel, la ponemos en una olla cubierta de agua y la dejamos cocer hasta que este blanda.
Las pepitas estarán negras, yo las separo de la pulpa después de cocida.
 
 
La sacamos del agua y con dos tenedores vamos sacando las fibras.
 
 
Escurrimos todo lo que podamos la pulpa y la pesamos.
En una olla ponemos el peso de la pulpa de agua, el peso de la pulpa de azúcar el limón y la canela.
Lo ponemos al fuego hasta que se haga un almíbar.
Retiramos el limón y la canela y añadimos la pulpa de la calabaza cocida y escurrida.

 
Dejamos cocer a fuego lento durante una hora más o menos.
 
La cocción es un poco orientativa dependerá de la cantidad que hagamos. Después se puede conservar como una mermelada en tarros de cristal o congelarse, eso depende del gusto de cada uno.
El resultado final no tiene nada que ver con el que compramos y se puede utilizar en numerosas tartas y pasteles.